La terapia ocupacional en los accidentes cerebrovasculares

La enfermedad cerebrovascular o ACV es una discapacidad con una alta incidencia que representa la tercera causa de muerte de la población y la primera causa de invalidez en personas adultas. Conversamos con el tecnólogo médico de Terapia Física y Rehabilitación del hospital Kaelin, Jean Guerrero, para conocer más

“El alcance de accidentes cerebrovasculares es más elevado en los últimos años de vida debido al envejecimiento de la población y a factores de riesgo relacionados con los estilos de vida”, sostiene Jean Guerrero. Además, afirma que las alteraciones que se derivan de un ACV son numerosas, que pueden ser de diferente complejidad dependiendo de factores como el tipo de lesión, localización y severidad inicial de la enfermedad, así como características propias de cada persona como: la edad, personalidad o capacidades previas.

Dentro de las clasificaciones podemos encontrar problemas sensitivos-motores como las hemiplejias, hemiparesias, hipertonía, espasticidad, hipotonía, flacidez, trastornos con el control de esfínteres, alteraciones de la coordinación, alteraciones propioceptivas y cinestésicas. Asimismo, esto tiene un impacto psicológico enorme que muchas veces viene acompañado de depresión que interferirá en el tratamiento.

Según el tecnólogo, el 68% de las personas afectadas por el daño cerebral adquirido presentan algún tipo de dificultad para llevar a cabo sus actividades cotidianas como: alimentación, aseo personal, transferencias, control de esfínteres, vestido, etc. Él indica que dentro de este contexto es donde interviene la terapia ocupacional que es la práctica del uso terapéutico de las actividades de la vida diaria de ocupaciones con individuos o grupos con el propósito de participar en los roles y en situaciones en el domicilio, colegio, lugar de trabajo, comunidad y otros ambientes.

“Los servicios de terapia ocupacional se proveen con el fin de promover la salud y el bienestar, y para aquellos que tienen o están en riesgo de desarrollar una enfermedad, lesión, trastorno o deterioro cognitivo. La terapia ocupacional atiende aspectos físicos, cognitivos, psicosociales y sensoriales, y otros elementos del desempeño en una variedad de contextos para apoyar el compromiso con las actividades de la vida diaria que afectan la calidad de vida”, concluye Guerrero.