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EPOC: conocer y prevenir
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es una patología prevenible y tratable pero no curable, que ocasionó en el año 2012 más de 3 millones de muertes en todo el mundo y representó el 6% de muertes registradas ese año. Se estima que para el 2030 será la cuarta causa de muerte a nivel mundial.
En el Perú tenemos pocos datos estadísticos de esta enfermedad, aunque hay un estudio de cohortes realizadas en la las ciudades de Lima, Puno y Tumbes, tanto en zonas urbanas como rurales, que registran una prevalencia del 6% de EPOC y que el 90% se encuentran en estadios I y II de GOLD.
Entre los principales factores de riesgo se encuentran: el humo de tabaco, la contaminación ambiental, la exposición a ciertos polvos y productos químicos, además de infecciones respiratorias.
Entre sus síntomas
se encuentran la disnea o ahogo, la tos crónica y la cantidad y calidad de la expectoración.
Para confirmar el diagnóstico además de la sintomatología hay que realizar una espirometría, que es el procedimiento que permite conocer la capacidad pulmonar. Para la clasificación por gravedad están los denominados estadios GOLD, divididos en cuatro, donde el I es el más leve y el IV el de mayor gravedad. Otro examen complementario que nos ayuda a identificar a estos pacientes es la radiografía de tórax en la que se pueden encontrar signos indirectos de la enfermedad.
Tenemos opciones terapéuticas a nuestro alcance para combatir la EPOC. La más recomendable es dejar el hábito de fumar. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el Perú ocupa unos de los últimos lugares en Sudamérica de prevalencia del consumo de tabaco desde los 15 años de edad en adelante (6.5%) comparados con otros países como Chile y Uruguay con un 37,4% y 22% respectivamente.
Entre los tratamiento farmacológicos
prescritos por los profesionales, los más habituales son los inhaladores que gracias a la actuales presentaciones para una sola inhalación durante el día, proporciona al paciente comodidad y mayor adherencia al tratamiento. Otros tratamientos preventivos incluyen la vacunación contra Influenza y Neumococo.
Como se mencionó, la EPOC es prevenible. Está en nuestras manos como profesionales educar e identificar a aquellos pacientes con esta sintomatología y factores de riesgo para así disminuir la morbimortalidad que conlleva esta patología.